Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

jueves, 24 de febrero de 2011

Día 33

Esta claro, aunque os pegue la chapa a diario, que no soy perfecta -ya sé que a los que me conocéis os costará admitirlo-, no camino por el sendero de la santidad, ni he eliminado de vida los múltiples defectos de este ser humano que soy yo.
Por ejemplo, os reconoceré que hay cosas que pueden sacar mi ira a flote en un segundo y hacen que de pronto me vea escupiendo un insulto con todo mi rencor. Hoy he vuelto a confirmar que odio con todo mi alma a los autobuseros (ya están en la RAE!!) que te ven llegar corriendo y cierran la puerta en el segundo en que tú llegas. Ni te miran cuando golpeas en el cristal, arrancan y encima quedan parados veinte metros por delante, porque el semáforo está rojo. Los que hacen lo contrario tienen toda mi simpatía, les dedico la mejor de mis sonrisas, pero no les amo con toda mi alma. ¿Significará este desequilibrio una sutil inclinación al lado oscuro? 
Teorías aparte, cuando ese insulto aflora a mis labios y me sorprendo hablando sola, me siento un poco ridícula, por lo inútil de mi reacción. Está claro que son reacciones causa/efecto difíciles de evitar, pero mi lucha está en conseguir escapar a sus efectos lo antes posible. Me sorprendo con la palabreja en la boca, con mi enfado inane, mi indignación absurda y me recoloco.
Me recoloco igual que recoloco mi cuerpo cuando descubro que mis hombros se han vuelto a inclinar hacia delante. Hombros arriba me digo, junta los omóplatos, mete sacro, eleva el cuello, hacia el cielo, pisa morena, pisa con garbo, convierte tu cuerpo en un canal que conecte tierra y cielo. Me gusta, con eso crezco unos centímetros, estoy segura.
No está bien preocuparse por salir de casa limpia y mona y llevar cara de acelga por la vida, no, no está bien. Mira a tu alrededor, fíjate en lo diferente que es cruzarse con alguien alegre y vivo a cruzarse con alguien al que parece que le pesa el aire que le rodea. Colabora, el contexto te necesita en todo tu esplendor. Una sonrisa tuya puede alegrarle el día a alguien.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ayer, a las 22:30 se estampó un autobús de la EMT contra la fuente central de la plaza de Colón en Madrid. El conductor del vehículo nº21 que realizaba su recorrido desde Arguelles hasta el infinito y más allá fue apedreado en la mismisima testa por una mujer enfurecida. CNJ, detenida y trasladada a las dependencias policiales alegó "que a su amiga nadie" y repitió "nadie le cierra las puertas en las narices y menos un autobusero de la RAE y que le importaba un rábano pasar la noche en el cuartel porque así no la despertarían a horas intempestivas para ir a Urgencias"