Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

martes, 22 de enero de 2013

Ay, les enfants de la patrie


Buenas tardes, el saludo de la azafata me sacó de la envolvente sensación sonora de mon petit monde français. Antes de llegar a España ya estaba de vuelta.

Se acabaron mis nueve días en tierra gala, para el que aún no lo sepa "Me llamo maruxiña L. y soy francófila total". Además del sonido de mi lengua preferida, después de la propia claro, porque hay ciertos juegos malabares que una solo es capaz de hacer en su lengua materna, y el disfrute de la familia que se ve poco, vuelvo:

  • De nuevo enamorada de una ciudad, mi lado urbanita me puede y Lyon tiene todo para hacerme perder la cabeza: No uno, sino dos ríos; casco antiguo y moderno; kilómetros de calles para deambular; cafés y restaurantes; tiendas; plazas y edificios enormes; universidad; cines, teatros; bicis; actividad humana en ebullición a todas horas...
  • Una obra de teatro. "Shakespeare's sister ou la vie materielle". Una cocina, cinco mujeres y una conversación compuesta de textos de Virginia Woolf y Marguerite Duras, alternada con música en directo. Todo ello en un pequeño teatro de una pequeña ciudad, una grata sorpresa y una gran calidad, de la mano de las cinco intérpretes: Sadie Jemmett, Mireille Maalouf, Winsome Brown, Yibin Li y Nicole Ansari.
  • Una película Alceste à Bicyclette. Dos actores y una obra de Molière. Un actor retirado es visitado por un colega y amigo que le propone volver al teatro para interpretar una de las obras más complejas del gran dramaturgo francés, El misántropo. Divertida, muy humana y con un final sorprendente que quizás no lo sea tanto (ya os lo diré cuando termine mis:)
  • Tres libros: Ça m'agace (algo así como "me molesta") de Jean Luis Fournier, elegido por simple capricho visual pero de cuya compra no me arrepiento para nada, pequeñas reflexiones sobre pequeñas cosas que el autor no soporta, escribe bien, se lee fácil y tiene su gracia. Y como consecuencia de mis dos citas culturales: La vie materielle de Marguerite Duras y Le misanthrope de Molière.
  • Tres cositas musicales: el viejísimo Tombe la neige del que os hablé el otro día, Olivier Daguerre descubierto por encargo de C., y una que ya conocía, que me encanta, con la que se inicia la obra de teatro de la que os he hablado y que os dedico.

Y con todo esto doy por explicadas las razones 13, 14, 15, 16, 17 y 18.

miércoles, 16 de enero de 2013

Comment se trouver en Romans et n'écrire pas un roman?


Pues nada, que no hay manera.

Ni el encuentro fortuito con Anna Carlotta y su larga trenza a lo Rapunzel. De su viaje relámpago para despedir a su fallecida abuela, 97 años. La misma que acogió en su casa de París a los últimos Habsburgo que abandonaron Austria. Ni la pequeña Sissi, rubia, con sus pasitos de pingüino que recién comenzó a andar. Ni el petate del hermano de Anna Carlotta, militar a punto de volver de algún país de oriente, colgado de su hombro.

Ni el manto helado que cubría el mundo ayer por la mañana. Ni el paseo con los ojos entornados de puro blanco que me rodeaba, bajo los copos que seguían cayendo. Ni los árboles con sus falsos frutos algodonosos. Ni el frío sobre mi piel.

Ni cinco mujeres en una cocina (bueno eso sí, me queda pendiente) recitando palabras de Virginia y de Marguerite.

Ni el familiar kiosko con corazón con las montañas al fondo.

Ni el sonido de la langue française acariciando mis oídos.

Nada, ni por esas.

Sera-t-il possible que j'aie oublie de mettre quelque muse dans ma valise?


Razón 5: Hacer una maleta, deshacerla y rehacerla.
Razón 6: Subirte a un avión y ver el mundo desde el cielo.
Razón 7: Llegar a otro lugar.
Razón 8: Comprender otra lengua (o algo de ella).
Razón 9: Faire une promenade.
Razón 10: Sentirte como en casa con la gente que quieres.
Razón 11: Abrir la ventana, ver nieve, pensar "tombe la neige" y encontrar esto http://www.youtube.com/watch?v=_64nc_NLE_I en Internet.
Razón 12: Escuchar une chanson que no conocías y que alguien te ha recomendado y dedicado previamente ;).

martes, 8 de enero de 2013

The master... puf


Os prometo que todavía estoy preguntándome qué puñetas pretendía contarme Paul Thomas Anderson, el director de The Master en esas más de dos horas largas, muy largas de película. Es más, soy incapaz hasta de explicar las carencias de la película, el porqué me pareció absurda y sin sentido, y eso que lo he intentado. No he conseguido articular una frase inteligible que argumente como una película sobre una secta no es capaz de transmitir ni por asomo la ideología de la misma, la fuerza de su líder, ni la relación del protagonista con ambos (la secta y el líder), ni las razones por las que llega, se queda, se va o vuelve.

Durante la primera media hora, o quizás la primera hora, tuve la impresión de que aquello nos dirigía a alguna parte. Pero a partir de determinado momento descubrí que el director se estaba riendo de mí y de bastantes personas más en nuestra propia cara. El único aliciente que puede tener la película es ver a Joaquin Phoenix haciendo de alcohólico contrahecho, lo cual tampoco es mucho.

Pese a todo,

Razón 3: la gente amable que te persigue hasta dentro del vagón de metro para devolverte el gorro que se te ha caído.

Razón 4: El Retiro, por supuesto.

domingo, 6 de enero de 2013

Razón 2



Mis (Tus) zapatos.

Son mágicos.

Un día aparecen llenos de regalos y al siguiente te pueden llevar a cualquier lugar, encuentro o situación inesperada... Sigue sus pasos y, sobre todo, ocúpate de que sus suelas se desgasten.

(Si no usas zapatos no te preocupes, son un placebo, la magia la crea el movimiento.)


sábado, 5 de enero de 2013

Queridos Reyes Magos 2013


La verdad que este año, con tanto ir y venir, me ha pillado el toro y como encima tengo a Mel desterrada vete tú a saber donde, nunca sabremos en que consiste su carta de Reyes este año.

Así que ahora corriendo no pienso lanzarme a una tormenta de ideas para plasmar el montón de cosas que les pido, no sé si a sus Majestades o al nuevo año. Me quedo unicamente con el propósito que me asaltó ayer a última hora, encontrar, ya que la petición me pilla a día cinco, al menos 360 razones, una por día, para saborear este 2013... y ustedes que lo vean.

Razón una: un pequeño saltimbanqui de rizos rubios buscando sitio en el salón de sus abuelos para poner sus zapatos.

viernes, 4 de enero de 2013

Compra en pequeño


Vengo de dar un paseo por este barrio adoptivo que me acoge estos días. Me encanta. Descubro con más detenimiento calles que conocía, digamos, de pasada desde hace años. Siempre hay algo nuevo que descubrir y no sólo porque ahora esté pasando más horas pisando sus aceras. Es que verdaderamente, cada día hay algo nuevo que descubrir, nuevos negocios abren sus puertas.

Establecimientos modernos, agradables, llenos de energía positiva y de ganas, muchas ganas, las de sus dueños, muchos muy jóvenes. Negocios que me llenan de energía, que me hacen disfrutar aún más de mis compras navideñas. Quid por quo, cosas bonitas, ambiente agradable, buen rollo y optimismo a cambio de una compra, quizás no muy grande, pero que de algún modo apoyará todo eso.

El otro día, por ejemplo, descubrí a mi nueva peluquera. El azar me llevó hasta un local pequeñito pintado de blanco, una silla de "barbear", un lavabo, una sonrisa y un corte a la medida. Hoy he vuelto a pasar para reservar un hueco en su ocupada agenda de autónoma, y me he enterado que además de poner su arte a disposición de sus clientes es profesora del mismo en una escuela de imágen y sonido.

Tiendas de ropas, de regalos, de diseño, librerías, peluquerías... Emprendedores, valientes, llenos de energía y optimismo. Gente dispuesta a trabajar para que este 2013 sea su año, nuestro año.

Compra en el pequeño comercio y disfruta de tu barrio.

jueves, 3 de enero de 2013

Estrenando año!!!


Sí, he tardado un poco en felicitaros este nuevo año.

Día 3 y el Balcón sin inaugurar el 2013. Y eso que  el mismito día 1, bajo la preciosa luz del sol, más de mediodía que mañanera, un súbito descubrimiento me sacudió: estamos de estreno y hay que celebrarlo.

Me gustaría dedicaros un post lleno de entusiasmo y alegría desbordada, pero creo que este año que empieza me ha pillado a la expectativa. Eso no quiere decir que éste no sea un post entusiasta y alegre, a ver si me explico...

No se si es generalizado, pero al menos yo, estoy abrazando este 2013 con ilusión, pero preguntándome, más que qué me traerá, qué vamos a construir juntos este nuevo año y yo. Sí señores, 2013 se nos ofrece  y se nos entrega, pero nos pide algo a cambio: imaginación, voluntad, trabajo, entusiasmo, ánimo de aventuras, grandes dosis de amor y de humor, solidaridad, realismo creativo...

¿Apasionante? ¿Acongojante? Eso sólo depende de nosotros y supongo que de nuestras circunstancias. Eso sí, no nos queda otra, abracemos, mimemos y recibamos este 2013, démosle lo que nos pide y superemos sus expectativas... ahí es nada.