Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

lunes, 21 de febrero de 2011

Día 30

En todo camino hay altos y bajos. Hoy me siento un poco culpable. Hace unos días me permití un capricho -por mi cumple me dije- y me compré el último de Marian Keyes = libros "insustanciales", si hay que llamar así a los libros desprovistos de carga intelectual, pero muy bien contados, en realidad son como tu mejor amiga narrándote las últimas aventuras de su vida diaria. Un vicio tremendo. (Puedo soportar la cuesta de enero-febrero-hasta el infinito y más allá sin darle de comer a mi armario, pero mi librería es claramente más glotona).
Y he ahí que he empezado a leer, a leer, y se me ha pasado la tarde. Sé que es absurdo regañarme por pasar una tarde enfrascada en la lectura. Pero es tan placentero para mí, que me acongoja no haber dedicado algo de tiempo a otras muchas cosas que tengo pendientes, o a medias...
Sólo me quedan diez de mis cuarenta días de renovación y sigo siendo voluble, cambiante  y pelín dispersa. Claro que Roma no se construyó en un día y una no puede renovarse de arriba a abajo de la noche a la mañana.
Supongo que el secreto está en encontrar el equilibrio. Qué carallo, el secreto está en no sentirte culpable...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

pensabas que dejando de comer albondigas y membrillo tu vida cambiaria? Me niego, no, y no. Lo unico que he sacado en claro de esta tortura es que mi madre lleva unas toquillas horrorosas cuando se acerca al brasero de su salon de hace cincuenta años. Se puede seguir viviendo así? Pues claro! El Principe de Bell Air me enseño mucho sobre esto.

Perita en Dulce

Anónimo dijo...

¿Y por qué te hace sentir culpable tirarte una tarde leyendo?, ¿es qué siempre hay que estar haciendo cosas que supuestamente son más importantes y que cuando pasan los años no dejan ni un sólo rastro en nuestra memoria?. La obligación para cuando no quede más remedio y el resto del tiempo para sentir, coño, que estás viva. Como dijo un profesor de la escuela de caminos "no dejes para hoy lo que puedas hacer mañana, por que puede que mañana no haya que hacerlo", cosas tiene mi padre.