Queridos Reyes Magos,
Este año voy a dejarme de tonterías. No pienso pediros nada material ni corpóreo. Total al final me traeréis lo que os quepa en el saco, como aquel año en que a mis seis años me trajisteis ese disfraz de Heidi talla 4 que no me cabía ni en un brazo. Yo sé que fue por no desilusionarme, pero acentuó mi complejo de niña gigante.
No toméis esto como un reproche. De todo se aprende, cuando con catorce años me quedé estancada en mi uno setenta, descubrí que las apariencias engañan y ningún complejo es para siempre. Así que empecé a aprender que lo mejor era tirarlos a la basura lo antes posible.
Así que igual que ahora hago con mi disfraz de Heidi, algo tarde lo sé, os doy las gracias por lo que me llegó este año de mis peticiones, la celebración de febrero fue apoteósica. Uno de los puntazos de este 2010 cuasi-perfecto.
Y ahora, ya, mi lista:
- Unas pesas llenas de optimismo, para conseguir equilibrio en la balanza durante todo el año.
- Ligereza de corazón, para tenerlo abierto los 365 días.
- Conjuntivitis cero, por favor, para tener los ojos bien abiertos.
- Disponibilidad para cualquier chas que surja.
- Perseverancia, ánimo, confianza, para seguir aprendiendo y practicando esas pequeñas actividades "artísticas" que contribuyen a llenar mi vida. (Ya sabéis que soy indisciplinada y pelín dispersa)
- Compasión y un poquito más de compromiso.
2 comentarios:
M es una farsante. No llega al 1,69.
Muy bueno Merys. Solo te falta pedir un poco de café para que no te duermas las pocas veces que te dejas ver.
Suerte en el 2011
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