Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

jueves, 30 de septiembre de 2010

Con estos si


Salgo de yoga y me acerco a la glorieta de Bilbao. Oigo un jaleo impresionante. En el semáforo de la calle Carranza un millar -o dos- de ciclistas, hacen la ola levantando su bici.
Hoy es jueves, último jueves del mes, y bicicrítica toma de nuevo las calles de la capital. Les sigo desde la acera opuesta, mientras bajan por Sagasta y Génova, hasta Colón. Veo el enorme gusano continuar hacia Jorge Juan.
En el sentido de subida un centenar de coches atascados tocan, histéricos, sus "bocinas". Lo siento si estabas atrapado en el mogollón. Toda mi simpatía se la llevan los ciclistas y patinadores que bajan. Un grupo alegre, sanote y reivindicativo. Con razón. A estos si que debería unirme, me digo. En cuanto tenga mi bici de paseo.
¡Queremos carril-bici! serio y completo ¡Ya!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

YO también me uno a los ciclistas! Si no fuera por esos capullos, hoy seguiría currando en Lanzarote Press, una revista que me tenía esclavizado trabajando día y noche. Afortunadamente, el último jueves de agosto, pasó por allí esta marabunta, y no pude llegar a cubrir la importante noticia que me habían encargado: fotografiar a una conocida reina del corazón chupando un helado sentada en la calle Goya. Como no llegué, me echaron, y dejé de ganar los ciento cincuenta euros del training que llevaba haciendo dos años y medio por unas 14 horas diarias. ¡oooooooooohhhhhhhhh! ¡qué penaaaaaaaaaaaaaaaa! Este mes he abierto una chamarilería, y todo me va de perlas. ¡Gracias, ciclistas capulletes, mi vida ha cambiado!

Thales Reyes

Anónimo dijo...

¿Te vas a arreglar la bici por fin mon coeur?