Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Lluvia



Se me ha levantado Gijón con el día torcido, mustio, como un novio llorón. Vale, le digo, pero no pienses que me voy a quedar aquí, contemplando como te lamentas.
Así que me he bajado a la calle.
No te hagas la víctima, sigo discutiéndole, y qué si las nubes te ponen sombrío. A mí me gustas también así.
Yo camino, él que haga lo que quiera.
Me gusta recorrer sus calles, sin necesidad de un mapa. A veces me despisto y aparezco en una plaza que no esperaba encontrar. Da igual, no me vas a liar, sé que caminado hacia allí recupero mi rumbo. Te crees que me desconciertas, pero no, con estos tejemanejes lo único que consigues es que cada vez te conozca mejor.
Al final, Gijón se sonrie, llueva o haga sol siempre es encantador.
Y es que las ciudades son más fáciles de contentar que muchas personas.

1 comentario:

sus dijo...

Aquí tb está lluvioso así que disfruta al menos tú estás en esa maravillosa tierruca.