Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

Y es que, todo depende del balcón desde el que miras

martes, 25 de junio de 2013

Apertas, la fuerza del abrazo


Yo ahora abrazo, os aviso.
No os asustéis si un día llego
y en lugar de dos besos fugitivos
os abrazo con fuerza.
Lo he aprendido
rodeada de otros ciento setenta
locos de los abrazos.
Hay abrazos tranquilos,
suave intercambio de cariño.
Hay abrazos intensos,
cargados de energía positiva.
Cada uno abrazamos
de una forma distinta
y distinta es la forma
en que abrazas
a cada una de las distintas
personas que te encuentras.
Cada abrazo es distinto,
único, irrepetible.
Hay algunos cuya fuerza radica
en la simple caricia de unas manos.
Los hay que son encuentro
de un par de corazones.
En otros,
notas todo tu cuerpo
y el cuerpo ajeno,
desde arriba hacia abajo,
y viceversa.
En algunos te sientes pequeña,
protegida,
en otras ocasiones,
eres de pronto Alicia, agigantada.
Para abrazarse bien,
hay que mirar primero
a sus ojos.
Avanzar sin perder el contacto visual
hasta que, ya escondido en esos brazos,
bajas los párpados,
escuchas el silencio
y aspiras... ese aroma.
Hay abrazos que me exigen
acabar con un beso,
o con dos, o con tres,
porque si no,
tanta energía concentrada
amenaza con hacerme explotar
...de alegría.
Es taaannn lindo,
reencontrarte de nuevo
en un abrazo.

No desperdiciéis la ocasión de un abrazo. Y si por timidez veis que flaqueo no dudéis en dar vosotros el primer paso.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso,memorable,cuánto amor destilan tus palabras,desde ya pienso en uno de tus abrazos tiene que ser muy especial

Maruxiña dijo...

Gracias anónimo. Espero estar a la altura el día que nos abracemos. Siempre me intrigas, soy tan curiosa que me gustaría saber los nombres de todos mis anónimos.

Anónimo dijo...

A mis brazos mon amour, ya voy corriendo, te voy a achuchar como si hubieses metido un golazo.

Maruxiña dijo...

Me gusta que te guste, Anonimo